jueves, 7 de mayo de 2015

TESTIMONIO DE SANIDAD DIVINA. DIOS ME SACO DE LAS TINIEBLAS A LA LUZ.





            Para descargar el testimonio en pdf. hacer clip "Aquí".

 

Desde  niño, me críe en un ambiente muy difícil y de mucha maldad. Recuerdo las  peleas a diario  que tenían mis padres, también con los vecinos  habían muchos conflictos en el barrio, y hasta en el colegio sufría el acoso de los compañeros, fue una etapa de mi vida muy dura.
                                            
Así que desde muy joven, me sentía muy solo,  tenía  pensamientos de desánimo, de amargura, depresión, miedos, complejos, pensamientos sobre acontecimientos del pasado, preocupaciones por mi  futuro,  tenía miedo hasta de mi mismo, a perder el control,  miedo de hacerme daño, miedo al suicidio.

 
Así que desde muy temprana edad, con solo  12 años le dije a mi madre que me llevase  al psiquiatra, ya que no podía aguantar más.  Tenía miedo de los pensamientos que tenia, que estaban continuamente bombardeando mi cabeza, y temía incluso por mi vida. 
                                     
El psiquiatra me  mando, medicación y hacer deporte, pero ninguno de estos remedios funciono, las pastillas que me mandaban, me dejaban medio drogado, siempre estaba adormecido, pero cuando pasaban sus efectos, volvían a aparecer los mismos pensamientos, y respecto al  deporte,  practique  atletismo, pero por mucho que corría aquellos pensamientos  me perseguía a donde fuese.              

 Como no encontraba salida a mi situación, comencé a buscar en libros de psicología y de autoayuda, para saber el porqué se producían estos pensamientos y encontrar una solución.


Usaba libros  de,  como vencer la depresión,  y  también de autoayuda como,  tus zonas erróneas, tus zonas mágicas, como aprender a ser feliz, etc.… Estos libros me daban ánimo  por muy poco tiempo, pero aquellos pensamientos continuaban atormentándome, no tenía paz en mi alma.                                     
Yo solo quería ser feliz y encontrar  alguna solución para vencer esos pensamientos destructivos que tenía; aunque no encontré nada.


 Sé que todas las personas a lo largo de su vida los tienen,  y por eso se refugian en el alcohol, en las  drogas, en la comida, en el sexo, y en otros vicios,  para evadirse de estos pensamientos y para llenar el vacío y la soledad existencial de sus vidas.
                                                    

Yo lo tenía todo,  trabajo, dinero, salud, pero no le  encontraba el sentido a la vida.  Busque en tener experiencias nuevas, hacer  amigos,  tener pareja, hacer deporte,   senderismo, escalada, ir de camping,  estar en  contacto con la naturaleza,  natación,  ciclismo, ir de pesca,  recorrer mundo, viajar, dar rienda suelta a mis deseos,  disfrutar de todo lo que  me gusta, comprarme cosas,  comer , bailar en discotecas durante toda la noche, beber alcohol hasta emborracharme, sexo, y un amplio  etc.                                                          
Pero nada de esto me hacía feliz, ni daba sentido a mi vida, no llenaba el vacio que tenía, ni quitaba esos pensamientos que me perseguían. 
 

Al no encontrar solución a mi infelicidad me angustiaba y me preguntaba; ¿habrá alguien  que pueda ayudarme? 


Entonces en el año 2000 empezaron a cambiar  las circunstancias  de mi vida rápidamente.


Perdí el empleo por el que tanto me había preparado; perdí la pareja con la que había planeado un futuro; pasaron cosas muy fuertes dentro de la familia y del vecindario.Toda mi vida se vino abajo en poco tiempo. Todos los proyectos que había hecho para mi vida fueron destrozados.                        
Empecé a ver la vanidad de la vida. Pensaba,  toda la vida preparándote y luchando por algo y en nada se desvanece todo.


Llego a mi vida una convicción de pecado muy fuerte, sentía un gran dolor por todo lo malo que había hecho a lo largo de mi vida, me sentía egoísta, lleno de maldad  y  rencor hacia muchas personas que me había hecho daño,  también podía ver mi perversidad, y los vicios en los que estaba atrapado.   Estaba muy  arrepentido de todo.


Al poco tiempo después,  me salieron unas manchas en la piel que  se extendieron más por todo el cuerpo de los pies a la cabeza y se hicieron  grandes de un diámetro de 2 a 3 centímetros. Empezaron a producir descamación en la piel, y a supurar pus, y a picar mucho.
                                         
Cuando me duchaba el agua caliente caía sobre mi cuerpo y parecía como si tuviese vidrios clavados. Era muy doloroso; todo estaba en carne viva. 


Fui de urgencia  al hospital “virgen de la arrixaca” en Murcia, ya que  tenía mucha  fiebre.


 El médico que me atendió, comentó con su compañera que nunca había visto una manifestación así en la piel tan fuerte y rara. Me pusieron una inyección para hacer bajar la fiebre, y me sacaron una muestra de sangre para analizar.  


Cuando salieron los resultados de la analítica, me llamaron a una consulta en la que estaban dos jóvenes estudiantes de medicina. Me examinaron y me hicieron preguntas sobre mis hábitos de vida. Después fueron a consultar a un médico en la sala contigua y yo escuché: 
                                   
-“tenemos a un chico con problemas en la piel. Tiene fiebre, las amígdalas inflamadas y su analítica muestra un 20% de linfocitos atípicos y esplenomegalias en la piel de 2 a 3 centímetros de diámetro”. 


Al rato vino el muchacho a la consulta y me dijo de qué se trataba.

 La enfermedad era un Exantema infeccioso producido por un virus y me mandó unas pastillas y guardar  reposo, y que si no  hacía bien el tratamiento,  podría llegar a morir porque la enfermedad estaba muy avanzada,  y el 20% de la sangre estaba infectada por el virus.                      
Después cuando salí del hospital, fui a comprar las pastillas a la farmacia. Cuando leí las instrucciones me di cuenta de que eran para el reuma y no para aquella  enfermedad.

  No sabía qué hacer. Sentía mucha impotencia,  como si no fuese real lo que estaba sucediendo; como si todo estuviese preparado. Se habían cerrado todas las puertas de nuevo y sin encontrar la solución.

Creo que Dios lo preparó así todo para llevarme hacia él.
A la mañana siguiente me desperté temprano, tenía poca fiebre y estaba colocando la ropa en el armario cuando vi un librito pequeño que habían comprado mis hermanos en la iglesia a la que asistían.
                                          

Se titulaba, “La fe, lo que es”. Comencé a leerlo muy profundamente y me dio mucha convicción.

 La palabra de Dios y el testimonio del autor, que también fue sanado de una enfermedad,  y de parálisis en sus piernas, era la salida a mi situación. Esto era algo nuevo para mí, la primera vez que lo escuchaba, ya que lo que  conocía como lo de  Dios,  solo era la religión católica y la tenía muy descartada.

Aquellas palabras  me persuadieron a creer y a confiar en Dios y en lo que Cristo hizo en la cruz.
Estas palabras eran: 

1ª de Pedro 2-24,”Quien llevó él mismo nuestros pecados en su cuerpo sobre el madero; para que nosotros, estando muertos a los pecados vivamos a la justicia, y por cuya herida fuisteis sanados”.

Isaías 53. 4-5 “Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él y por su llaga fuimos nosotros curados”.
                                         
Estos versículos de la palabra de Dios nos dicen una gran verdad; que Cristo ya llevó nuestras enfermedades y dolencias al igual que el pecado, cuando murió en la cruz.

Yo tenía que creer que desde que Cristo lo llevó en la cruz yo ya estaba sano. Tenía que creerlo de verdad; con todo mi corazón, sin dudar nada.

 Así que lo primero que hice fue tirar las pastillas que me había mandado el médico,  a la papelera. Mis padres se enfurecieron y me dijeron que si estaba loco.
                                                        
                                  

Yo les dije que Cristo ya me sanó en la cruz y que no necesitaba medicinas. Otra cosa que hice es que el médico me mandó reposo y yo hice  todo lo contrario; me marché a trabajar el lunes como siempre con fiebre y todo. Estaba creyéndole a él,  que era verdad lo que dice su palabra.
   
 Yo comencé a creer que ya estaba sano y a darle las gracias porque el Señor Jesucristo  ya me había sanado,  desde que el murió en la cruz, llevando toda enfermedad y dolencia.                        
Llegaban pensamientos del Diablo a mi cabeza (el Diablo, es,  el que ponía esos pensamientos destructivos, que me perseguían  desde que era joven, él es el mentiroso  que engaña a toda la humanidad), y me decía  que me iba a pasar algo, que si estaba loco, que si me iba a morir; pero mi corazón estaba persuadido de la palabra de Dios  y no hacía caso de ninguno de estos pensamientos.
  
Me aferré a sus promesas con todo mi corazón y con todo mi ser. El enemigo de toda humanidad el Diablo, siempre tratara de hacernos dudar y de ponernos en contra de la palabra de Dios.

Lo hará con engaños con pensamientos desde nuestra mente por medio de la duda, o de las personas que nos rodean sobre todo las más cercanas a nosotros.
                         
Después de tres días de lucha con estos pensamientos del Diablo estaba muy cansado,  era el día de la constitución Española, el  6 de diciembre del año 2000.

Cuando me desperté me puse a orar; a hablar con Dios y estando en la cama acostado mirando al techo de mi habitación, le decía al señor que porqué no era sanado.

 Le dije:” yo estoy creyendo tu palabra y entonces ¿porqué no recibo la sanidad?

 Me acuerdo que le dije:” Señor todo me ha fallado en la vida,  ¿tu también me vas a fallar?

 Hubo un gran silencio.
Y después dije: Señor yo tengo voluntad pero no puedo más”.

En ese mismo instante  empecé a llorar como nunca en mi vida lo había hecho,  me quebrante totalmente.
                                       
Al principio era un llanto  suave pero fue aumentando  tanto que sollozaba y gemía, de manera que mi cuerpo se erguía.  Era un llanto muy profundo.

Llegó a mí una sensación de hormigueo muy suave que se fue bajando hacia mis piernas y sentí  como si me estuviesen clavando miles de alfileres por todo el cuerpo.

 La sangre empezó a circular de una forma muy fuerte dentro de mis venas; tanto que yo la podía sentir  y me quemaba. Era como fuego dentro de mis venas.
Esto duró un buen rato y  mientras tanto no paraba de dar gracias a Dios por todo.

 Le pedí  que me enseñase a amar y que desapareciesen de mi los rencores, la maldad, la perversión, y todos esos pensamientos de depresión y tristeza que había tenido toda la vida, que el Diablo ponía en mí.
                                                   

Después de aquella experiencia me sentía muy relajado, en paz, como flotando. 
                                   

No podría describir aquella sensación tan maravillosa; era como si estuviese en el cielo.

 Después me levanté y mientras desayunábamos conté a mis hermanos lo que me había pasado. Las manchas de la piel fueron secándose hasta que desaparecieron. 

El sábado siguiente mis hermanos me invitaron a ir por primera vez a la iglesia a la que asistían, aunque yo no quería ir  porque pensaba que era una secta.
                                     
Me convencieron diciéndome que allí habría  personas que como yo, habían tenido experiencias  sobrenaturales  con Dios.
Yo tenía miedo porque mucha gente no entiende estas maravillas aunque se llamen cristianos, y lleven toda su vida en la iglesia.  Pensaba que no me entenderían. 

No solo Dios me sanó de esta enfermedad, sino que también me liberó de todo esos pensamientos destructivos que he contado que tenía durante toda la vida.

Ahora él me ha hecho libre y no solo de esos pensamientos, sino del pecado, el rencor, la culpa, la perversión  y de los vicios que me dominaban.
                                         

Ahora es como si hubiese una nueva vida dentro de mí, tengo paz, tranquilidad,  me siento amado, y lleno interiormente,  mis hábitos de vida tampoco son  los mismos, me gusta hacer lo bueno, y aborrezco todo lo malo, el pecado, los vicios.
 
Dios  ha cambiado mi corazón, ya no veo las cosas como antes, ahora soy feliz, y he encontrado el sentido de esta vida.

Doy gracias a Dios por tener tanta misericordia de mí y por sanarme de mi enfermedad; por haberme dado  la vida eterna a través de Cristo no siendo yo merecedor de nada.
                                             
Él me ha hecho ver su gloria.   Toda la gloria sea para Dios quien lo preparó todo. Él es el autor y el consumador de la fe.

Pido a Dios,  que este testimonio pueda servir a muchos,   que estén en la misma situación en la que yo estaba,  para que crean en lo que Cristo hizo en la cruz,  por nosotros los pecadores,  dando su vida en sacrificio por nosotros y para salvar nuestras almas. 
                                   
El es el camino, es  la verdad y  es la vida.

Los momentos de la vida en los que estamos pasando más dificultades, pruebas, problemas, o  adversidades, son los que Dios utiliza para que nos arrepintamos, de nuestra maldad,  y reconozcamos que somos débiles, y le necesitamos para que cambie nuestras vidas.
                                      
Dios no ha venido a condenar al ser humano, ni a ponerle más normas o leyes, ni hacer ninguna  religión.

Él ha venido a salvar su alma o pensamientos y hacerle libre de esclavitudes del pecado y  vicios que se enseñorean del ser humano, y que no nos podemos  quitarnos  por nosotros mismos.
                       







           






        

miércoles, 18 de marzo de 2015

¿ASÍ QUE YA NO QUIERES IR A LA IGLESIA? "LIBRO y AUDIO-LIBRO".


                                                                       
asi que ya no quieres ir a la iglesia
 En el enlace de arriba puedes descargar el libro en español de forma gratuita.



¿ASÍ QUE YA NO QUIERES IR A LA IGLESIA?
                            
                                         Por Jacob Colsen.

EL libro, “¿Así que ya no quieres ir a la iglesia?” Narra de manera Fascinante y muy personal el renacimiento de un hombre cuyo cristianismo es teórico a una entrañable amistad con Cristo, afectando a todo lo que hace, piensa y dice.

“No hay nada que el Padre desee más para tí, que te dejes caer de lleno en el regazo de su amor y nunca te muevas de ese lugar para el resto de tu vida”.

Descarga este Libro Gratuitamente en este enlace: 
¿Así que ya no quieres ir a la iglesia? 

Sabemos que será de crecimiento espiritual.

Para cualquiera que cuestione su desilusión con “la iglesia” Este libro les ayudará a ver que no están solos. Jake bajo la dirección de Juan, pone en marcha en un viaje de descubrimiento  un viaje a la libertad de “religión” y todas las expectativas que conlleva. A medida que Jake abre los ojos descubre una “nueva libertad”.  Libertad del temor de los hombres y de la obligación de la “institución”

A través de Juan, Jake aprende una vez más a confiar en su Padre Celestial por todas las cosas y salir con una vida de fe auténtica.

Si no sabes, o no te gusta leer también lo puedes escuchar en audio-libro, subidos a youtube. Haz clip en el siguiente video y escucha el audiolibro por capitulos.

                                                         HACER CLIP EN EL VIDEO PARA ESCUCHAR EN AUDIO-LIBRO.





sábado, 14 de marzo de 2015

EL PROGRESO DEL PEREGRINO." LIBRO Y AUDIO-LIBRO".




                                                   DESCARGAR LIBRO EN PDF.

Si no sabes, o no te gusta la lectura, puedes escucharlo en audio-libro, en el canal de youtube, o descargarlo a tu Pc. en formato mp3.



Haz clip en el siguiente video para empezar a escuchar el audio-libro.

                                                                             HACER CLIP PARA ESCUCHAR  EL AUDIO-LIBRO

El progreso del peregrino  es una novela alegorica por John Bunyan, originalmente publicada en ingles en 1878.

El título completo es "El progreso del peregrino desde este mundo al venidero, mostrado como un sueño".

Es considerada una de las obras clásicas literarias, habiendo sido traducida a más de cien idiomas. Consta de dos partes—la primera fue publicada en 1678 y expandida en 1679, y la segunda fue publicada en 1684.
                                                                     
El protagonista se llama Cristiano, y la mayoría de los personajes son llamados por su característica más evidente. Relata el viaje de Cristiano por su vida, buscando la salvación.

 La historia comienza en un infausto lugar llamado Ciudad de Destrucción en la cual Cristiano habita en compañía de su familia, esposa e hijos.

 Cristiano aparece en escena con un libro en sus manos, vestido de harapos, con los ojos llenos de lágrimas, lamentando la noticia que ha recibido por medio de este misterioso libro, a saber, su ciudad, Ciudad de Destrucción, será destruida con fuego del cielo y todos sus habitantes serán llevados a juicio por sus crímenes en contra del Rey más justo.
                             
 Desesperado, Cristiano trata inútilmente de persuadir a su familia de abandonar esta ciudad para salvar sus vidas, pero ellos, mostrando un profundo desinterés en sus palabras, lo tildan de loco o enfermo.

 Ante tal situación, desesperado, Cristiano sale al bosque para llorar su ruina cuando súbitamente un hombre llamado Evangelista (el que porta buenas noticias) se acerca a él con un mensaje radical, a saber, HUYE DE LA IRA VENIDERA que caerá sobre esta ciudad y escapa rumbo a la Ciudad Celestial, hogar del más justo de los Reyes; sin pensarlo ni un minuto y ante la posibilidad de escapar de tan nefando destino, Cristiano comienza su peregrinaje hacia la salvación.


Cristiano se halla perdido entre diversas opiniones pero escucha a este hombre, después de mancharse en el pantano de desconfianza; luego, se topa con un hombre que le hace desviarse de su camino.

Siente que ha fallado y que no debe seguir así; Evangelista lo encuentra y le hace ver su error; llega con él a la puerta donde Buena Voluntad le hace entrar y le conduce al hogar del Intérprete.

Allí, le enseñan cosas indispensables y el camino hacia la cruz. Es en la cruz en donde la carga inicial que tenía el protagonista se le cae, y se le otorga el derecho a la Ciudad Celestial.

 Al cruzar el collado de dificultades, llega a un lugar donde los leones atemorizan a este hombre; el portero le dice que no tenga temor de ellos, que están ahí para probar la fe de los peregrinos. Una vez dentro, se encuentra con unas doncellas que le interrogan y le hacen un examen.



Es en ese lugar en donde Cristiano se prepara con una armadura especial para la parte más importante de este libro: la pelea con el mismo diablo Apolion. Es interesante ver cómo describe Bunyan esta lucha y cómo sale librado de ella Cristiano.


Al atravesar el valle de sombra de muerte, ve a lo lejos a alguien cuyo nombre es Fiel. Llegan a un paraje llamado Feria de Vanidad en el cual los habitantes encarcelan a estos peregrinos por no haber comprado nada proveniente de ese lugar.

Cristiano sale del cepo, pero Fiel es llevado a la hoguera. Luego, conoce a alguien llamado Esperanza. Juntos, caminan hasta llegar a un sitio llamado Campo de la Vereda.
                      
La negligencia les condujo cerca del Castillo de las Dudas y son llevados al calabozo por un gigante llamado Desesperación. Escapan de ahí empleando la llave de las promesas.

Arriban pronto a la tierra de Beulah,cruzaran el río de la muerte que se interpone entre ellos y la ciudad celestial.
Más adelante llegan hacia su destino final: la Ciudad Celestial. 
  
OPINIÓN PERSONAL:  MUY BUEN LIBRO, Y EDIFICANTE PARA EL CRISTIANO,  EN EL CUAL LE DA UNA ALEGORÍA DE LOS PELIGROS, ERRORES, TROPIEZOS, PRUEBAS, Y DIFICULTADES QUE SUCEDEN A LOS QUE ANDAN EN EL CAMINO ESTRECHO Y ANGOSTO, LA VERDADERA VIDA, HACIA LA LUGAR CELESTIAL NUESTRO DESTINO FINAL.




viernes, 19 de septiembre de 2014

COMO DEJAR EL TABACO PARA SIEMPRE Y SER LIBRE DE TODA ANSIEDAD.

El tabaco es una de las esclavitudes del ser humano


El tabaco es adictivo debido principalmente a su componente activo, la nicotina, que actúa sobre el sistema nervioso central.

 El fumador sufre una dependencia física y psicológica que genera un síndrome de abstinencia, denominado tabaquismo. 

La nicotina genera adicción, pero tiene efectos antidepresivos y de alivio sintomático de la ansiedad.

           
                                                  



Esta es la palabra clave por la cual se produce el tabaquismo, LA ANSIEDAD.

El tabaco  produce un efecto antidepresivo, de paz, y relajación por un momento muy corto, pero enseguida viene de nuevo la sensación de ansiedad y de nuevo hay que encender el cigarrillo.

Todas las personas que nacen en este mundo se enfrentan a todo tipo de situaciones que producen preocupaciones, dudas, temores, incertidumbre, miedo a la muerte y a la soledad etc...
            
CALMA LA ANSIEDAD POR MUY POCO TIEMPO

Y cada ser humano trata de llenar ese vacío, de alguna manera, unos el tabaco, otros el alcohol, otros las drogas, otros el sexo, otros la comida, otros la lujuria, otros el dinero, etc...Cosas que parecen como nada un simple cigarrillo pero hace esclavo a un hombre hasta la muerte, el ser humano no puede salir de estas esclavitudes por el solo necesita reconocer su debilidad.

                                           
Como esta escrito el enemigo, ha venido a hurtar, matar, y destruir, se refiere al Diablo, el enemigo de toda la humanidad.
                                     
Pero Jesús fue claro cuando le dijo a la mujer samaritana, que el que beba de este pozo volverá a tener sed, pero el que bebiese del agua que Jesús le da, no volverá a tener sed, jamas.
                        
 HACE DAÑO AL FUMADOR Y A LOS DE SU ALREDEDOR

Porque solo Dios puede salvar el alma de todas estas dolencias que hemos comentado, que hacen a los hombres esclavos de muchas cosas, pero debemos de ir a la raíz de los problemas, a la base, que es la naturaleza humana que necesita ser regenerada y salvada por el poder y la gracia de Dios, para darle vida y vida en abundancia.


Así que si queremos ser libres del tabaco o de la ansiedad que lo proboca debemos arrepentirnos, y confiar nuestras vida a Dios, ponerlas en sus manos, y creer en lo que Cristo hizo en la cruz por nuestros pecados, para libertarnos, y perdonarnos.
                                                                                      
LA NICOTINA ES UNA SUSTANCIA TAN ADICTIVA COMO, LA HEROÍNA Y COCAÍNA

Como dice la escritura "si el hijo de Dios os libertare, seréis verdaderamente libres", ¿pero a que se refiere?. ¿Libres de que?.

Libres del pecado, de todo aquello que nos hace esclavos, todo aquello que nos domina, ansiedad, depresión, estres, temor, enfermedad, ira, sexo, contiendas, adulterios, fornicación, etc... 

ARREPIENTETE Y CREE. Y RECIBIRÁS LA LIBERTAD Y LA VIDA.




martes, 16 de septiembre de 2014

¿COMO PODEMOS ANDAR EN EL ESPIRITU ?




Esta es una pregunta que tarde o temprano nos hacemos todos los creyentes, ¿estaré andando en el espíritu estaré andando de forma que le agrade a Dios?.
 
Esto nos pasa porque estamos ignorando la obra de Dios en nuestras, vidas. Cuando nos convertimos a Dios y le entregamos nuestras vidas, él se hace cargo de toda nuestra vida tanto material como espiritual, en otras palabras, no depende de nosotros o de lo que hagamos, sino de lo que Cristo hizo en la cruz por todo los seres humanos.
 
Las religiones nos dicen que tenemos, que cumplir ciertas normas y leyes, incluso nos llevan a hacernos esclavos de la ley de nuevo, como dice en gálatas 3.1-5 oh gálatas insensatos, ¿ quien os engaño para no obedecer a la verdad, a vosotros ante cuyos ojos Jesucristo fue ya presentado como crucificado?  
Esto solo quiero saber de vosotros, ¿ recibisteis el Espíritu por obedecer la ley de Moisés, o por el oír con fe? y dice tan necios sois, ¿habiendo comenzado por el (andar) espíritu, ahora vais a acabar por la (andar) carne ?

En otras palabras mas sencillas habiendo comenzado (en el espíritu) a confiar en el amor de Dios, y en la obra perfecta de Cristo, en sus justicia que nos trae la paz y el reposo, y la salvación de nuestros pecados, donde encontramos la gracia y el poder para ser libres, y  ¿ahora queréis  (andar en la carne) justificaros por vuestras obras, cumplir la ley de Dios, en vuestras fuerzas, y rechazar la obra y el sacrificio de Cristo?
 
Por tanto la respuesta a la pregunta que nos hacemos muchas veces, y saber si estamos viviendo, y andando en el espíritu; es, permanecer en fe, confiados en el sacrificio de Cristo y el amor del Padre hacia nosotros, y no movernos de esta posición, eso es andar en el espíritu, entrar en el reposo de Dios, reconciliarnos con Dios,estar en completa paz, esto es también vivir en la gracia, permanecer en la justicia perfecta de Cristo, no en la nuestra, que es según la ley.
 
El justo por la fe vivirá, y la ley no es fe.
 
 Por tanto dice, Juan 15.5-9 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en, él
éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
El que en mi no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará, y los recogen, y los  echan en el fuego, y arden.
 
Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen, en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho. En esto es glorificado mi Padre en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos.
 
Permanecer en él, es también ser un discípulo, de Jesús, porque el permaneció en el amor del Padre.
 
Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permanecer en mi amor.




                                              
                                               
La paz, el reposo, son el testigo que nos indica nuestro caminar en el Espíritu.
 
 Cuando andamos en fe, confiados en las promesas y cuidados de Dios,  confiados en su amor, por nosotros, entramos en esa paz que sobre pasa todo entendimiento, ese reposo y esa paz que las cosas de este mundo no te pueden dar, estas caminando en el espíritu, vives completamente confiado. El se encarga de tu vida, de cuidarte, de protegerte, de transformarte desde tu interior en esa nueva criatura que eres en Cristo, eres sanado de las heridas del pasado, eres restaurado, santificado y apartado del pecado sin tu esfuerzo, andas en novedad de vida, en libertad.
 
Cuando perdemos esta paz, o reposo por nuestra soberbia, o por querer hacer las cosas a nuestra manera, sin confiar en Dios ni en sus palabras, cuando dejamos de depender de él, y caemos de la gracia intentando nosotros cumplir con nuestras fuerzas la ley, no siendo humildes estamos andando en la carne en nuestras habilidades, en nuestras fuerzas. En este estado no podemos agradar a Dios, no habrá frutos del espíritu en nuestras vidas.
 
Como está escrito Dios resiste a los soberbios y da gracia a los humildes.



                                                                   


                    
¿Cómo lograr "andar en el Espíritu"?

Para este andar, se requiere la humildad, que es simplemente reconocer mis debilidades o pecados y  que sin Dios yo no puede hacer nada, que le necesito para todo y que tengo que rendirme por completo a él, depender de su habilidad, su fuerza, su guía, su enseñanza o revelación, su poder transformador que cambie mi vida desde mi interior, y rompa con mis esclavitudes, que me haga libre, que me santifica por completo, no yo sino él, el hace la obra completa. 
 
Como dice filipenses 1.6  estando persuadidos de que el que comenzó la buena obra en vosotros la perfeccionara hasta el día de Jesucristo.
 
Si de esta manera nos rendimos completamente su voluntad al Espíritu Santo y dependemos de sus habilidades y no de las nuestras en lo personal, Él se encargará de que la vida de usted sea agradable a Cristo y lo glorifique verdaderamente.
                                     

Como dice su palabra en Hebreos 13.20-21 Y el Dios de paz que resucitó de los muertos a nuestro Señor Jesucristo, el gran pastor de las ovejas, por la sangre del pacto eterno, os haga aptos en toda obra buena para que hagáis su voluntad, haciendo él en vosotros lo que es agradable delante de él por Jesucristo, al cual sea la gloria por los siglos de los siglos. Amén.







TESTIMONIO DE SANIDAD DIVINA. DIOS ME SACO DE LAS TINIEBLAS A LA LUZ.

             Para descargar el testimonio en pdf. hacer clip "Aquí".   Desde  niño, me críe en un ambiente muy difícil ...